Llevo la caducidad del tiempo atada a las zapatillas,a cada paso,en cada calle me espera un ayer demasiado vivo.A veces pienso que es de tontos entenderlo,simplemente hace falta no perder el equilibrio cuando hay bordillos.




viernes, 5 de septiembre de 2008

Anochece.

Verde y granate,el color de los geránios colgados en los balcones de finales de agosto.Las espirales retorcidas de las farolas no son más que espejo roto en cientos de pedazos de mis ruinas.Colgadas,comiendo a bocados sensibles oscuridad ausente;la madrugada se ceba y las cortinas de la ventana lo saben,que cada noche cuando vuelvo me esperan,como quien espera a que suene el despertador por las mañanas.

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